La D.O. Rías Baixas homenajea a sus fundadores en su 30 aniversario

Bodegas LA VAL en Salvatierra de Miño (Pontevedra), fue el escenario del un homenaje a los fundadores de la D.O.  Rías Baixas en agradecimiento a su labor en la creación y desarrollo de la Denominacón de Origen que celebra su 30 aniversario. El objetivo del homenaje fue el reconocimiento público a todos aquellos profesionales que participaron en la creación de la D.O. Rías Baixas, desde los técnicos de las diferentes Administraciones, cámaras agrarias y sindicatos agrarios, los centros de investigación pasando por cada viticultor, bodega y cooperativa.

Al acto, acudieron los 20 homenajeados por ser los impulsores de la D.O. Rías Baixas así como distinguidos miembros del sector entre los que se encontraban María Soledad Bueno, la primera presidenta de la D.O. Rías Baixas; Juan Gil de Araujo, actual presidente del Consejo Regulador; Antonio Alén, maestro de la Cofradía del vino del Condado del Tea y espumosos;  además de diversas personalidades del sector público gallego como Arturo Grandal, Alcalde de Salvatierra; Nava Castro, Directora General de Turismo de Galicia y Miguel Ángel Pérez, Director General de AGADER (Axencia Galega de Desenvolvemento Rural).

En primer lugar, y tras una breve introducción como breve repaso a la corta historia de la D.O. Rías Baixas que en los albores de su creación, en el año 1988, tenía censadas 14 bodegas, 237 hectáreas de vino y 492 viticultores; intervino Antonio Alén, Maestro de la Cofradía del vino del Condado del Tea y espumosos. Antonio Alén explicó que lo que se pretendía transmitir en este 30 aniversario era: “El sincero agradecimiento por el trabajo, la dedicación y el esfuerzo de poner en marcha y trabajar en un proyecto que 30 años después da como resultado una de las Denominaciones de Origen más importantes a nivel nacional e internacional”. A continuación, se entregaron las distinciones a los homenajeados y el turno de palabra fue para María Soledad Bueno, la primera presidenta de la D.O. Rías Baixas, en representación de todos los homenajeados. María Soledad quiso destacar que se debe mirar mucho al presente y al futuro pero nunca olvidar el pasado, de dónde venimos, y destacó: “Es bueno el reconocimiento a un grupo de personas que conseguimos hacer una revolución agraria en Galicia (cambiando el paisaje de nuestra zona) cuando la D.O. Rías Baixas era todavía una entelequia.” Además, recalcó que se desmintió la individualidad del gallego demostrando que sí se podía trabajar en común y se explayó sobre la búsqueda del nombre de la Denominación de Origen. Para finalizar su intervención, tras un somero repaso a los orígenes  y el desarrollo de la D.O. (creación de un reglamento, publicidad sobre el vino, etc.) quiso incidir en que los pioneros que llevaron a cabo este proyecto contaron con un gran aliado que no podía ser otro que nuestro producto, el vino de las Rías Baixas.

Tras una mirada al pasado, llegó la intervención de Juan Gil de Araujo, actual presidente del Consejo Regulador, para hablar sobre la situación actual del vino Albariño y de la D.O. Rías Baixas y poner en valor el presente de la viticultura gallega. El presidente del Consejo Regulador comenzó exponiendo: “Aquellos inicios tan tímidos han dado como resultado hoy en día la producción de alrededor de 25.000 millones de litros de vino que a 6 euros el litro se convierten en 150 millones de euros (esto no lo consigue nadie en España y pocos en Europa); que se distribuyen entre 184 bodegas (5.000 viticultores aproximadamente) y generan un empleo de 7.000 personas de forma directa y 15.000 personas colaborando en la época de vendimia consiguiendo una redistribución de esos 150 millones de euros en el rural gallego que repercute en que éste no se despueble y en mantener nuestra agricultura viva”. Además, añadió que esta situación permite que en la actualidad nuestra agricultura siga estando viva consiguiendo llevar el nombre de la  D.O. Rías Baixas, de Galicia y España a todos los restaurantes del mundo. Aunque añadió: “No debemos olvidar que en el futuro habrá que sortear algunas amenazas legislativas en el ámbito español como en el europeo como las trabas burocráticas que dificultan el mantenimiento del modelo tradicional de la viticultura en Galicia”. 

Este acto de 30 aniversario por la creación de la D.O. Rías Baixas continuó con la participación de Arturo Grandal, alcalde de Salvatierra, el cual no quiso dejar de mencionar los actuales proyectos de su ayuntamiento como son la celebración de la LIX Edición de la Fiesta del Vino del Condado del Tea así como la creación del Museo del Vino que tiene prevista su inauguración para principios del año 2019 como evidencia clara de que en esta tierra se sigue apostando por el vino. Seguidamente, obtuvo la palabra Nava Castro, Directora General de Turismo de Galicia, que quiso agradecer a todos los homenajeados la puesta en valor de esta tierra, ya que han creído en el potencial de sus productos lo que ha permitido entre otros logros que Galicia contase con la sexta ruta del vino más transitada a nivel nacional el año pasado. Aún así, quiso resaltar: “Galicia aún tiene mucha más capacidad de seguir avanzando y mantenernos como referente a nivel nacional porque tenemos lo principal que es la tierra, un gran producto como el vino y la gente trabajadora que siempre creyó en su producto y en su manera de trabajarlo.”

Cerró el acto de homenaje, la breve intervención de Miguel Ángel Pérez, Director General de Agader (Axencia Galega de Desenvolvemento Rural) en la que quiso agradecer sus esfuerzos a todos los implicados en la creación y crecimiento de la D.O. Rías Baixas pero sobre todo a los bodegueros y viticultores: “Quisisteis hacer y haréis de vuestro producto un vino único reconocido en el mundo entero y que lleva el nombre de Galicia más allá de nuestras fronteras.”

El proyecto de todos ellos ha dado como resultado la consolidación de la D.O Rías Baixas como una de las más importantes a nivel nacional e internacional. Los pioneros que creyeron en este proyecto consiguieron que se pusieran las bases para el desarrollo del sector llegando hasta un presente en el que se empieza a introducir la viticultura de precisión gracias a la implantación de la última tecnología en los procesos de producción y elaboración del vino. 

En este acto de agradecimiento se quiso resaltar la importancia de la creación de un blanco de referencia, una variedad que en la actualidad ha traspasado fronteras, que convirtió As Rías Baixas en una zona en la que todo el mundo quiere invertir y que exporta un tercio del vino embotellado gracias a unos pioneros que hace 30 años creyeron en la calidad de su producto y en su forma de trabajarlo.