El buen clima facilita excelente sanidad, calidad y grado a sus viñedos ecológicos

La vendimia continúa su curso en la DOP Jumilla y se encuentra ya generalizada por todo su territorio. Tras recoger las variedades más tempranas como Garnacha, Syrah, Garnacha Tintorera, Tempranillo y Cabernet Sauvignon en variedades tintas, y Sauvignon Blanc, Macabeo y Airén en variedades blancas, han dado paso al resto de uvas, y ya se ha iniciado la recogida de la insignia de la DOP, la uva Monastrell.

Con el municipio de Jumilla en fase 1 flexibilizada, los trabajos se mantienen de forma segura, y la situación se sobrelleva dentro de la “nueva normalidad”. Tanto viticultores como bodegas y todo el personal de CRDOP Jumilla ponen máximo esfuerzo en llevar a cabo una vendimia segura.

Un excelente grado de maduración y azúcar en las uvas hace presumir una vendimia de máxima calidad. Si bien, las lluvias primaverales provocaron la llegada del Mildiu a la planta, la buena circulación del aire, y las horas de sol hicieron que la planta sanase y se eliminara ese potencial problema tan presente en otras zonas. Afortunadamente, no hay que lamentar episodios como la DANA que provocó gravísimos daños en muchos viñedos de la DOP Jumilla el pasado año.

El cultivo de viñedo ecológico es de vital importancia en esta Denominación, que prácticamente mantiene el 100% de los viñedos de forma ecológica. El microclima de los diversos terruños hace que las condiciones sean óptimas para evitar todo tipo de enfermedades y plagas.

La vendimia de la DOP Jumilla se iniciaba a principios de agosto, con un adelanto de unas dos semanas, y evoluciona a buen ritmo en el último mes. Un viñedo principalmente en secano y formación en vaso, y la diversidad de sus suelos, microclimas y variedades de uva, da lugar a una de las vendimias más largas de España, ya que comienza a primeros de agosto en la zona sur y finaliza las primeras semanas de noviembre en la parte más norte.

A día de hoy se calcula que aproximadamente un 60% de los viñedos ya han sido vendimiados, por lo que podemos decir que los vinos tintos, rosados, blancos, dulces y de licor están en pleno proceso de elaboración. Respecto a la producción, es pronto para indicar resultados, pero en general se prevé un crecimiento en torno al 10-15% de producción y un grado alcohólico ligeramente superior.

Tras las inspecciones de rendimiento en campo, los inspectores del Consejo Regulador ya se encuentran controlando la entrada de uva en bodega, que se desarrolla con normalidad. Se comprueba la trazabilidad de la uva y sus parámetros de calidad, descalificando aquellas partidas que no cumplan estos requisitos establecidos en el pliego de condiciones del Consejo Regulador.