Un muy buen mes de junio – como viene siendo tendencia en los últimos meses -, tanto en valor como en volumen, con crecimientos del 17,2% y del 24,8% respectivamente, permite que las exportaciones interanuales crezcan el 7,6% en euros y el 10,3% en litros, con ligera caída del 2,5% en los precios medios. Por productos, los vinos envasados, particularmente espumosos y tranquilos, son quienes mejor mantienen sus precios, con fuerte aumento en el valor de las ventas, pero son los vinos a granel, junto con los vinos de licor y los de aguja, los que más rápidamente aumentan sus volúmenes de exportación en estos meses. Por países, el crecimiento de nuestras exportaciones es generalizado entre los principales mercados, destacando la fuerte recuperación de ventas en EE.UU., China, Italia, Canadá y Suiza y la peor marcha en Países Bajos.
Los datos del mes de junio de 2021 mantienen el gran crecimiento de las exportaciones españolas de vino que venimos observando desde marzo. Este crecimiento, es extraordinario, no ya ante los flojos meses del 2020, afectados por los confinamientos y la pandemia, sino en términos históricos. Así, los casi 256 millones de euros facturados por el conjunto de nuestros vinos en junio del 2021 suponen una cifra récord en la historia de nuestra vitivinicultura. De forma algo menos acusada, los 212 millones de litros vendidos en el mismo mes, suponen la segunda mejor cifra obtenida en junio en los últimos años, solo por detrás del extraordinario mes de junio de 2015. Estas cifras suponen respectivamente un 16,1% más que el promedio de los últimos 5 años en valor y un 15,5% más que el promedio del mismo quinquenio en volumen.
En el mes de junio de 2021, España exportó 212 millones de litros, por valor de 255,9 millones de euros. En términos absolutos, se exportaron 37,5 millones de litros más que en junio del 2020 y se facturaron 42,1 millones € más.
La comparación entre las tasas de variación del (i) interanual (últimos 12 meses a junio), (ii) del periodo acumulado en el año (enero a junio) y (iii) del mes (junio), es decir, de lo más amplio a lo más concreto y de lo más antiguo al momento más próximo, nos dan una idea de cómo evolucionan nuestras ventas y de su tendencia. Tendencia, que en este caso es claramente positiva, tanto en valor: 7,5% à 15,7% à 17,2% como en volumen: 10,3% à 21,4% à 24,8% aunque con un cierto deterioro de los precios medios: -2,5% à -4,7% à -6,1%
El primer semestre del año, por lo tanto, se cierra con cifras positivas de crecimiento a doble dígito: del 15,7% en euros y del 21,4% en litros, con aumentos en términos absolutos de 187 millones de euros y de más de 202 millones de litros.
Por productos y centrándonos en los datos del semestre, prácticamente todos los tipos de vinos mejoran sus ventas, con la excepción de los vinos con IGP envasados y los vinos a granel tanto con IGP como varietales, pero cuyas caídas son ampliamente compensadas por las mayores ventas de graneles con denominación de origen y, sobre todo, sin indicación de calidad alguna. Como viene pasando en los últimos tiempos, la variación en este semestre es más positiva en valor para los vinos envasados (+18,1%), pero algo más positiva en volumen para el granel (+31,2%). Esta distinta evolución hace que se revaloricen mejor los vinos envasados, con particular buen crecimiento de los precios medios de vinos espumosos (+25,7%) y vinos con DOP tranquilos (+9,2%) en este semestre, mientras que pierden cerca del 20% los precios medios del vino a granel, situándose por debajo de los 40 céntimos de euro por litro.
El vino de licor, por su parte, sigue creciendo a un extraordinario ritmo superior al 40% tanto en valor como en volumen y con precios medios estables. Los vinos espumosos, en este periodo, muestran una revalorización importante, cayendo ligeramente sus ventas en botellas, pero aumentando sus precios medios y su facturación por encima del 20%. En este caso de los vinos espumosos, con variaciones muy diferentes entre cava y el resto de la categoría. Cava crece un 22% en facturación, pero básicamente por aumento del número de botellas. Por otra parte, los espumosos diferentes de cava crecen un 21% pero mucho más por aumento de sus precios medios que por venta de más botellas, que, por el contrario, disminuyen de forma sensible.
Entre los vinos tranquilos, los que se exportan con DOP crecen por encima del 19% en euros gracias a su mejor precio medio (+9,2%) y a un aumento similar (9,3%) del volumen en botellas. Por su lado, los vinos a granel aumentan ventas en más del 31% en volumen, gracias en especial a los graneles sin indicación de calidad, y venden casi 160 millones de litros más en el semestre, pero perdiendo cerca del 20% en sus precios medios, lo que disminuye su crecimiento en valor a un más moderado 5,4%.
Mención especial debe hacerse este mes también a la evolución del mosto, cuyas exportaciones están creciendo este año a un fuerte ritmo, tanto en el mes como en lo que llevamos de año y en los últimos 12 meses; y tanto en valor como en volumen. En euros, hemos pasado en el semestre de los 97 millones a los más de 133 millones. En volumen, el crecimiento en estos 6 primeros meses del año es de más de un millón de hectolitros, desde 1,9 M hl en el primer semestre del 2020 a los más de 3 millones del mismo periodo del 2021. Este fuerte crecimiento, de casi el 60% en volumen, conduce a un aumento interanual (últimos 12 meses) de casi 1,7 millones de hectolitros.
Si nos fijamos en los datos de la campaña vitivinícola, para la que ya disponemos de datos referidos a sus primeros 11 meses y, por lo tanto, muy próximos a su fin, comprobamos que los 2.020,4 millones de litros vendidos en lo que llevamos de la campaña 20/21 superan en más de 212 millones lo que se exportó en los primeros 11 meses de la campaña anterior. Más de 2 millones de hectolitros de aumento, que suponen cerca del 12%. Ganancia, que es algo inferior (8,2%) en valor pero que supone 194 millones de euros vendidos en esta campaña por encima de la anterior, hasta situarnos en unas ventas totales de 2.553 millones.
Por último, en lo que se refiere a los doce meses comprendidos entre julio de 2020 y junio de 2021 (interanual), las exportaciones españolas de vino se situaron en 2.214,4 millones de litros (frente a los 2.172,3 millones de litros que veíamos el mes pasado) con crecimiento que se acelera hasta el 10,3% (frente al +8,2% que veíamos a mayo), por valor de 2.803 millones de euros, que es también cifra superior a los 2.765,7 millones de euros que veíamos a mayo y crecimiento del 7,5% (que también es superior al +6,7% del mes pasado). Es decir, en ambos casos, valor y volumen, las cifras de crecimiento mejoran respecto de las que veíamos el mes pasado.
En términos absolutos, España exportó, en estos doce meses, 207,6 millones de litros más y facturó, 196,6 millones de euros más en vinos, a lo que se suman crecimientos importantes también en vinos aromatizados, mostos y vinagres, particularmente en volumen. De hecho, sumados todos los productos vitivinícolas al vino, el aumento en volumen alcanza en los últimos 12 meses casi los 400 millones de litros y más de 260 millones de euros.
Dividiendo las exportaciones de vinos en dos grandes grupos (envasados y graneles), comprobamos que ambos crecen de forma importante en estos últimos 12 meses… pero con diferencias. Los vinos envasados crecen más en valor que en volumen, se revalorizan un 1,9% y aumentan sus ventas hasta los 2.335 millones de euros y los 1.004 millones de litros. Por su parte, los vinos a granel crecen más en volumen que en valor (14,1% frente a 4,5%) y pierden precio medio hasta situarse en los 39 céntimos de euro, que se distancian más de los 2,33 /l de los envasados. Dos tipos de vino, por lo tanto, que funcionan de forma muy distinta y que también este año y en los meses más recientes, están evolucionando de manera muy diversa. Con esta dispar evolución, los vinos envasados pasan a representar el 83,3% del total de las exportaciones españolas de vino, pero los graneles pasan a suponer el 54,6% del volumen total.
Análisis por productos y mercados (primer semestre 2021)
Como ya vinos, las exportaciones españolas de vinos espumosos, crecen en el primer semestre en más del 22% en valor, hasta los 203 millnes de euros, pero
pierden ligeramente ventas en botellas (-2,8%) hasta situarse en 72,7 millones de litros. Evolución dispar que, además, se debe a un muy diferente comportamiento que las estadísticas oficiales de Hacienda registran entre el cava y el resto de espumosos. Así, el crecimiento del 22,5% en las exportaciones de cava en valor, hasta los 159 millones de euros en el semestre, se debe fundamentalmente al aumento del 23,5% en la venta de botellas – hasta alcanzar los 57,8 millones de litros – pero a precios medios ligeramente inferiores (-0,9%) que se sitúan en los 2,76 €/l. Por el contrario, y según estas estadísticas, los espumosos distintos de cava logran un aumento similar en valor (+20,8%) pero no por vender más botellas – que de hecho se reducen a casi la mitad de las vendidas en el primer semestre del año anterior – sino por un aumento extraordinario del precio medio de este tipo de vino espumoso, que se más que duplicaría en este periodo desde 1,29 €/l a los 2,93 €/l actuales. Cifras tan extraordinarias deben observarse con cuidado y seguirse de cerca para ver si (i) se confirman como tendencias motivadas por cambios importantes en el mercado – que, en su caso, pudieran explicarse por nuevas tendencias en compañías importantes de la categoría – o (ii) por si pudiera tratarse de errores en las declaraciones.
En todo caso, con 57,8 millones de litros y 159,3 millones de euros, las ventas exteriores de Cava supusieron el 78,4% del valor y el 79,4% del volumen total de vino espumoso exportado por España en los seis primeros meses de 2021. Mayor proporción ahora en valor que en volumen porque cambia en este periodo – y siempre según las estadísticas oficiales de Hacienda – el precio medio de cada una de las subcategorías, con el del Cava ya ligeramente por debajo (2,76 €/l) del precio medio de los espumosos no-Cava (2,93 €/l), como consecuencia de extraordinario aumento del valor de estos últimos en meses más recientes.
Por mercados, Estados Unidos es el primer destino para el espumoso español, con unas ventas extraordinarias en este semestre de 34,7 millones de euros, que no solo aumentan en un 48% respecto del mismo periodo del mal año pasado, sino que superan ya las de igual semestre del 2019. Crecen también con fuerza las ventas a Bélgica, que supera en este periodo a Alemania como segundo cliente en términos de valor con casi 23 millones de euros facturados frente a los 22 millones de este. Y en mucha menor proporción (+2,9%) crecen las ventas a Reino Unido, mientras caen las dirigidas a Japón. También en volumen se producen cambios importantes. EE.UU. se convierte en el primer semestre del 2021 en el primer cliente del vino espumoso español al crecer un extraordinario 61% y superar los 12 millones de litros en 6 meses. Supera así a Alemania que, con 10,6 millones de litros y una disminución del 21% en las compras en volumen de vino español (no en cava, pero sí y de forma radical en otros espumosos sin indicación de calidad), pasa a ocupar la segunda plaza en este ranking. Algo similar – menores ventas en volumen pese a ganar en valor – ocurre en Reino Unido, mientras que suben también en litros las dirigidas a Bélgica.
En lo que se refiere a las exportaciones españolas de vinos tranquilos envasados, cierran el primer semestre del año con crecimientos del +16,7% en valor y del 11,2% en volumen, tras los buenos datos registrados en los meses más recientes. Sus exportaciones se situaron en los 369 millones de litros, por valor de 863,4 millones de euros, con un precio medio un +5% superior, que se situó en los 2,34 €/litro.
De nuevo y como ya veiamos en la comparación entre envasados y graneles, suben más en valor los vinos de precios medios más elevados (DOP) pero crecen más en volumen vinos envasados de precios medios inferiores (sin indicación de calidad).
Los vinos con DOP, que son los que más peso tienen dentro de los vinos tranquilos envasados, son también los que más crecen en este semestre en términos de valor, con incremento del 19,3% y ganancia de 103 millones de euros, para pasar a facturar más de 641 millones en el periodo. Pero su evolución es relativamente peor en volumen, con un aumento importante pero menos de la mitad que en valor (9,3%) y superado en el crecimiento en litros por los vinos envasados sin indicación de calidad.
Por su parte, las exportaciones de vinos con IGP envasados, aumentaron ligeramente en litros, pero facturando menos que el primer semestre del año anterior (-4,5%) por importante disminución de sus precios medios.
Los vinos varietales envasados representan todavía la mitad de los vinos con IGP en volumen, aunque se van acercando a estos en valor, por tener un precio medio los vinos varietales envasados muy superior al de los “vinos de la tierra”. En este primer semestre, se vendieron 37,7 millones de litros de varietales envasados, por valor de 60,4 millones de euros, a unos precios medios de 1,60 €/l que superan claramente el precio medio de los vinos con IGP (0,95 €/l).
Si tenemos en cuenta los vinos envasados en su conjunto, es decir, incluyendo los vinos tranquilos, generosos y de aguja) y por mercados, entre los once principales, todos aumentaron en términos de valor salvo Países Bajos, que cae en este periodo tanto en euros como en litros. En volumen, de hecho, también caen en este semestre las ventas dirigidas a Reino Unido y a Francia. Reino Unido, EE.UU. y Alemania mantienen las principales posiciones entre nuestros clientes, con crecimientos en los tres casos a doble dígito en valor y destacando el aumento de más del 20% en el mercado norteamericano. También en términos de valor, pero a distancia de los tres primeros mercados, crecen con fuerza las ventas a Suiza, China y Canadá, destacando la fortísima recuperación de nuestras exportaciones en el mercado asiático, que supera el 51% en euros y el 36% en litros. Recuperaciones importantes se dan también en los mercados de Japón,
México y Bélgica, que fueron muy afectados por la pandemia en 2020. En el caso de Francia, con importancia cre- ciente como cliente también de vinos envasados, pero donde el principal pro- ducto exportado por España es vino a granel, sucede en aquellos justo lo contario que en este: entre los envasados, vendemos este semestre algo menos de botellas pero más caras, logrando mayor facturación; por el contrario, entre los graneles, aumenta de forma sensible la venta de litros (+6,3%), pero a precios sensiblemente inferiores (-20%) y por lo tanto, facturando menos (-15%).
Por colores, crecen en este semestre con más fuerza los vinos blancos envasados en valor que los tintos y rosados (19,2% frente a 16%) y también en volumen (15,5% frente a 9,4%), pero tintos y rosados siguen representado más del doble de las exportaciones en litros (254 millones de litros frente a 115 millones) y más del triple en valor (674 millones de euros frente a 190 millones), por ser los tintos y rosados sensiblemente más caros, de media, que los blancos (2,65 €/l frente a 1,65 €/l respectivamente).
De forma similar, entre los vinos a granel, los blancos también evolucionan este año mucho mejor que los tintos y rosados, si bien en este formato las cifras globales de venta están mucho más parejas.
También entre los vinos envasados, pero en envases entre dos y 10 litros (mayoritariamente bag-in-box), las ventas de vino español crecen con fuerza en este semestre, pero a ritmo ligeramente menor que otras categorías. Las exportaciones españolas de vinos en envases entre 2 y 10 litros aumentaron un 7,7% en valor hasta alcanzar los 34,6 millones de euros y un 8,9% en volumen hasta los 27,6 millones de litros, a un precio medio de 1,25 €/l, que no solo supera con creces el precio medio de las ventas de vinos a granel, sino también el de determinadas subcategorías – las más económicas – de vinos en envases de menos de 2 litros. Suecia es el primer cliente de los vinos españoles en BiB con 5,2 millones de euros de facturación y crecimiento del 11,4% pero Francia se le acerca en importancia con un aumento del 17,1% y facturación que se sitúa ya por encima de los 4 millones de euros en el semestre. Noruega, otro gran cliente de vinos en este formato apenas aumenta un 1,4% sus copras de vino español en BiB durante el semestre y se sitúa en tercera posición, disminuyendo además las compras en volumen.
Dentro del vino en bag-in-box, las distintas subcategorías evolucionaron de forma diferente. Están aumentando con mucha fuerza (33,6% en volumen y 26% en valor) las ventas de vino en BiB varietal. Con algo menos de vigor crecen las ventas en este formato de vinos sin indicación de calidad, que siguen siendo las mayoritarias con el 50% del total del vino vendido en litros y algo más de 1/3 de la facturación, pero con crecimientos más lentos que los del vino varietal. Y, por el contrario, caen en este semestre las exportaciones españolas de vinos en BiB con DOP (en volumen) y con IGP (en valor y volumen). En todos los casos, con precios medios entre los 0,94 €/l del BiB sin indicación y 1,95 €/l del BiB con DOP, que destacan favorablemente sobre las ventas de vinos a granel.
Por último, y en lo que se refiere a las exportaciones españolas de vino a granel (en envases de más de 10 litros), cerraron los seis primeros meses de 2021 con una fuerte recuperación, principalmente en volumen, aunque a precios en descenso La facturación ha crecido un 5,4% hasta los 236 millones de euros y las ventas en volumen un 31,2% hasta los 6,54 millones de hectolitros, con disminución del precio medio del -19% hasta los 36 céntimos de euro por litro. La situación de los mercados y el tamaño de la cosecha han podido influir sobre esta evolución.
Por subcategorías, el gran protagonismo lo tienen el granel sin indicación de calidad que supone 4,7 millones de hectolitros de los 6,5 millones totales (un 72,5%) y 161,3 millones de euros respecto del total de 236 millones (un 68%). Y son estos graneles sin indicación los que mejor van en el primer semestre del año, con crecimiento del 41% en volumen, aunque solo del 13% en valor, ligeramente por detrás del aumento de facturación que disfrutan los graneles con DOP (21,6%) que, sin embargo, re- presentan ya una cuota muy pequeña del total de la categoría (4,9 millones de euros del total de 236 millones). Retroceden este año las ventas de granel con IGP un 15% en volumen y casi el 23% en valor y crecen en valor, pero no en litros las ventas de granel varietal. En cuanto a los precios medios, graneles sin indicación y varietales parecen no distanciarse, teniendo los primeros un precio medio de 34 céntimos de euro por litro y de apenas 38 céntimos los segundos y, en ambos casos, con disminución del 19%
Por mercados, Francia es claramente el primer destino del vino a granel español, con un 30% del volumen total vendido y el 27% de la facturación. Le sigue Alemania, tanto en valor como en volumen y Portugal e Italia, alternándose posiciones en euros y litros. De entre ellos y en este primer semestre le hemos vendido un 6% más de vino a granel a Francia, pero facturando un 15% menos por ser menores los precios, como también hemos vendido un 14% más a Alemania facturando un 10% menos. Más espectacular es el incremento del 147% en las ventas a Italia en volumen y los crecimientos también superiores al 100% en Costa de Marfil, Rumania, China, Canadá o República Checa. En el lado negativo, desaparecen prácticamente (-92%) las ventas de vino a granel a Rusia, hacia donde habíamos enviado en el primer semestre del 2019 más de 24 millones de litros. Y caen también, aunque mucho menos, las ventas de vino a granel hacia Reino Unido.
Ordenados los mercados de mayor a menor importancia para el granel español, las variaciones en este primer semestre en litros vendidos son notables. En total y tan solo en el semestre, 150 millones de litros más, de los que una buena parte han ido hacia Italia y, en cantidades también importantes, hacia Francia, Alemania, Portugal y Rumanía:
En definitiva, el mes de junio vuelve a ser muy positivo para las exportaciones españolas de vino, como ya lo vienen siendo los meses desde marzo de este año. Con crecimientos extraordinarios en el mes, superiores al 17% en valor y al 24% en volumen, conseguimos unas ganancias importantes en el semestre, del 15,7% y 21,4% respectivamente en euros y litros. Estos buenos datos más recientes, llevan también a cifras positivas de crecimiento tanto en la campaña vitivinícola (a punto de concluir) como en el interanual, con cerca de 200 millones más de facturación en el último año y un aumento de más de 200 millones de litros en el mismo período. Pero las ventas en junio no son solo buenas en comparación con datos flojos del mismo mes del año anterior, todavía afectados por la pandemia y las limitaciones a la venta y promoción de los vinos, sino que son buenos en términos históricos, resultando el mejor junio por facturación en la serie disponible y uno de los mejores meses de junio en volumen.
El valor de los vinos de mayor precio (espumosos y vinos con DOP envasados) lideran la recuperación en euros, mientras que el volumen de los vinos más económicos (graneles y vinos sin indicación de calidad) son los que más crecen en litros. Se revalorizan los vinos caros, lo que permite mayor facturación, y se abaratan ligeramente los vinos más económicos, pero consiguiendo mayores crecimientos en volumen. Una tendencia en la línea de la creciente bipolarización de los mercados mundiales del vino.
Entre los principales mercados, destacan los fuertes crecimientos de ventas en EE.UU., Canadá o Suiza y la extraordinaria recuperación de exportaciones a China e Italia, con crecimientos en facturación superiores al 68% y 88% respectivamente. Entre los principales 21 mercados del vino español, este primer semestre del 2021 solo se muestran caídas de ventas en los casos de Francia, Irlanda y Rusia. En el primer caso, Francia, pese a un aumento considerable (10,9%) del volumen exportado, lo que denota menores precios. En el caso de Rusia, por la práctica desaparición de las ventas de vino a granel, tras la entrada en vigor de su nueva ley del vino el pasado año.
La realidad de estos datos más recientes, así como las perspectivas para los próximos, muestran, pues, un sector del vino español muy dinámico, que ha sabido sortear en los mercados internacionales los graves problemas planteados por la pandemia, nuevos aranceles y otras limitaciones y, por lo tanto, con muy buenas posibilidades de desarrollo futuro.