LA VIÑA EN CATALUÑA: HACIA LA CERTIFICACIÓN 100% ECOLÓGICA

Los principios de sostenibilidad y respeto hacia el medio ambiente están cada vez más presentes en las viñas catalanas, donde viticultores y bodegas amparadas bajo las 11 denominaciones de origen vinícolas trabajan con intensidad en el cambio de modelo que implica la orientación hacia la viticultura ecológica. Así lo indican las cifras del último informe del Consejo Catalán de la Producción Agraria Ecológica (CCPAE) correspondiente al pasado 2019.

Según este informe, Cataluña consolida su liderazgo estatal en la producción ecológica en general, y se sitúa entre los principales territorios del Estado en lo que respecta a la conversión de miles de hectáreas de viña al cultivo ecológico. De las 53.699 hectáreas de viña registradas en 2019 en Cataluña, un poco más de un tercio (18.632 has) ya son ecológicas, lo que suponeun incremento del 11,7% respecto al año 2018.

Por demarcaciones, la mitad de las viñas trabajadas en ecológico (51,7%) están situadas en Barcelona. Tarragona ocupa la segunda posición, con un 39,1% de viñas eco. Girona es, por su parte, la demarcación que más crece en cultivo de viña ecológica, con un incremento del 59% respecto al año 2018, seguida por Lleida, que crece un 21%.

El cultivo de viña ecológica supone, además, el 42% del total de cultivos trabajados en agricultura ecológica en Cataluña, posicionando así al sector del vino como uno de los motores fundamentales en lo que respecta al modelo económico basado en la ecología. Y es que no solo es líder en los trabajos en el campo, sino que la elaboración y embotellamiento de vino, cavas y espumosos ocupa la segunda posición en el ranking de actividades de las industrias agroalimentarias ecológicas, con 273 empresas y un porcentaje del 12% del total.

Si analizamos estos datos desde el punto de vista económico, y basándonos en las últimas cifras disponibles, correspondientes al año 2018, el volumen de facturación económica del sector vitivinícola es de 134,66 millones de euros, lo que supone un 19,30% del total de facturaciones, el segundo más importante, por detrás solo del negocio de la comercialización y la distribución. Un indicador más de la tendencia al alza del sector vitivinícola, que crece un 26% respecto al año 2017, cuando contaba con un volumen de facturación de 98 millones y medio de euros.

7 vinos ecológicos con DO, premiados en el Bioweinpreis

El concurso alemán Bioweinpreis, uno de los concursos internaciones de vinos ecológicos más valorados por la industria, ha premiado en su 12a edición, celebrada la pasada semana, siete vinos con Denominación de Origen vinícola catalana, dos de ellos con medalla de oro: el Blanc de Noirs 2019 y el Helga 2018, un blanco y un espumoso de la bodega Biopaumerà, y ambos con Denominación de Origen Tarragona.

Entre los vinos blancos han recibido premios también el Raimat Castell Chardonnay 2019, de Raimat (DO Costers del Segre) y el 1+1=3 Signature Organic 2019 de U Més U (DO Penedès), ambos con medalla de plata. También ha sido premiado el Ànima Nua Cor Viu 2019 de Cellers Domenys (DO Conca de Barberà) con una medalla de bronce, mientras que la referencia tinta del vino ha obtenido también medalla, en este caso de plata.

Entre los vinos tintos, ha habido otra medalla de plata que ha sido para Raimat Abadia Eco 2018, con DO Costers del Segre.

Cambio climático

La enorme afectación por mildiu que han sufrido las viñas catalanas este año ha sido especialmente importante en aquellas viñas trabajadas en ecológico, debido fundamentalmente a las intensas lluvias de la primavera.

Pero, pese a este episodio, no se espera que las cifras de viñas ecológicas bajen en los próximos años. Y es que este no deja de ser un episodio puntual. Las previsiones climáticas continúan mostrando un escenario de cambio climático, con temperaturas cada vez más altas y reducción de lluvias, especialmente en el arco mediterráneo, condiciones que, por otra parte, favorecen a los cultivos ecológicos.

Este escenario de cambio climático, sumado al incremento del interés del consumidor por los productos de proximidad, sostenibles y ecológicos (tal como indican diferentes estudios como el Mapa Motivacional de la OIVE o el Barómetro del Consumo de Vino en Cataluña, ambos de 2019) aplanan el camino para seguir creciendo en el campo de la viticultura ecológica.