MODA ATLÁNTICA

En los últimos tiempos se utiliza mucho el término “Atlántico”: “dieta atlántica”, “vinos atlánticos”, “clima atlántico”, “perfil atlántico” …, pero, ¿esto responde a una simple moda o hay algo más detrás de este término? Se percibe cada vez más cierto hartazgo en según qué personas con estos términos, entendiendo que seguramente consideran más una moda que algo realmente sólido, o al menos que está demasiado manido. En este artículo intentaremos aportar nuestra visión del tema.

Podremos empezar por recordar ese anuncio de una famosa cerveza que decía algo así como “Mediterráneamente” evocando a algo que nos sonará a todos, la “dieta Mediterránea”, el estilo mediterráneo, playa, sol, terraceo, Romero, y un sinfín de tips que nos llevan al veraneo y al disfrute de toda esa maravillosa costa. Cuando alguien nombra el Mediterráneo todos visualizamos un estilo, un clima, una gastronomía y en resumen un modo de vida bastante reconocible.

Lo mismo pasa seguramente con el término “atlántico”, donde reconoceremos un estilo muy aceptado en general de clima suave y lluvioso, gastronomía que mira al mar (mariscos y pescados) sabores salados y ácidos, acantilados, “Salitre y Solpor” que decía aquel y en general un modo de vida tranquilo, seguramente menos bullicioso y más recogido que el Mediterráneo.

 

BODEGA ADEGA MARTIN CODAX PLANTACION VIÑEDO

En la parte de los vinos, que es lo que nos ocupa, empecemos por recordar que todos tenemos claros los tres estilos principales de clima que tenemos en nuestros país, El clima Mediterráneo que se caracteriza por ser extremadamente seco, soleado y cálido tanto por el día como por la noche, El clima Continental caracterizado por su relativa falta de lluvias y su gran contraste entre el frío de las noches y el calor del día, y por último, el clima atlántico que destaca su alto volumen de pluviometría, sus pocas horas de sol y sus temperaturas medias suaves tanto de día como de noche. Este último es el que le imprime ese carácter reconocible como atlántico a los vinos, haciendo vinos frescos, más ligeros, menos alcohólicos y que consiguen acideces más elevadas en general.

Estos tres climas no se circunscriben a las zonas que le dan el nombre, sino que por ejemplo en Galicia podemos encontrar los tres tipos de clima, aunque el predominante sea el Atlántico por razones obvias.

Pero no solo es el clima el que imprime carácter “atlántico” a un vino, también son las variedades de uva, una Albariño, una Branco Lexítimo o una Caiño pueden ofrecernos acideces y notas que nos llevan a ese “estilo atlántico” del que hablamos, sin embargo, seguramente con una Garnacha Tintorera lo encontraremos menos presente. Y también el terreno, un suelo granítico, arcilloso o calcáreo puede influir decisivamente en esos estilos, mientras que un suelo pizarroso puede llegar a ser menos “atlántico”.

El que escribe, si cree que es un término del que presumir y que potenciar, hace poco leía un artículo que hablaba de los vinos Atlánticos en Argentina y explicaba cómo están bajando sus viñedos principalmente de vinos blancos a la costa atlántica para darles esas características notas frescas y ácidas que tanto bien les hacen a los vinos.

También es importante recordar que buena parte de culpa que este estilo se ponga de moda es el tan manido y ya seguramente imparable Cambio Climático, que hace que según que zonas tengan verdaderos problemas para elaborar vinos alcohólicamente legales y bebibles, obligándoles a vendimiar antes, plantar más altos los viñedos, separarlos del suelo, o autorizar en sus denominaciones de origen variedades como la Albariño, la variedad blanca más atlántica y más de moda en este momento.

Galicia no es la única portadora del carácter atlántico, pero si posee sus imponentes “Penínsulas Atlánticas”, proas que emergen hacia el mar con viñedos únicos y singulares y cuya forma, situación y “terroir” consiguen imprimir un carácter único y hasta ahora inimitable a los vinos que ahí nacen. Morrazo, Salnés y O Barbanza forman esas tres lenguas de tierra que se adentran en el océano y donde se elaboran algunos de los grandes vinos atlánticos de nuestra tierra.

En definitiva, que creo que se debe aprovechar ese tirón “atlántico” tanto que sea como moda como que sea una realidad contrastable. Vivimos en la era de los Tweets, de los imputs cortos, del mensaje claro y directo, y por lo tanto conseguir un término que en tan pocas letras sea capaz de decir tanto es algo que debemos proteger y explotar.

 

Alberto Varela Amado

Sumiller y Ceo de Choiva Viños